Hoy me despojo de todo lo que me pesa. He decidido quitarme de encima todo lo que me abruma, y quedarme sólo con lo más importante.
Sí, amigos. Lo he hecho. Hoy dejé atrás los miedos, la tristeza absurda, el dolor sin sentido, las lágrimas negras, las noches sin dormir, este, a veces, masoquimo emocional...Dejé atrás cada día perdido sin una sola sonrisa. Sí, he decidido cambiarlo todo. Y he aquí lo que me quedo:
Me quedo con el amor incondicional de mis padres. Con la sonrisa y el calor de Lola. Con la fuerza y el cobijo de Pilar. Con la bondad personificada; Azu. Me quedo con el brillo de Santi y la alegría siempre multicolor de las sobris.
Me quedo también con ese "te entiendo, otro yo" de Marta. Con mi reencuentro con Ulpi. Con la paz, el coraje y la complicidad con Ángel. Con esta unión del alma con Teresa, con esta media vida con Toñi.
Me quedo con todo este cariño por Conchi, Ana y Elena. Con esta casi adoración por Vicen. Me quedo con el optimismo de mi hermano. Con la fuerza de Elisa. Con la dulzura de Tania. Con los sentimientos de Dani. Con las palabras de Quim. Con los poemas de Annie. Con las canciones de mi primo. Con estos amigos de la infancia reencontrados, con las risas con mis compañeros de trabajo, con la gente tan especial que he conocido en estos dos años...
Me quedo con esta decisión de "VIVIR INTENSAMENTE, SIN MEDIOCRIDADES, SIENDO POETA VIVA" Y DE NO OLVIDAR NUNCA ESTE AUTORREENCUENTRO. Con esto me quedo hoy, amigos...
jueves, 3 de junio de 2010
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